El Hotel Solar Do Castelo, situado en Lisboa, debe su nombre al Castillo de San Jorge, que en su día fue una fortaleza y en la actualidad, ya sin muros, es un barrio peatonal muy concurrido y repleto de tiendas, bares y cafeterías. El edificio es una mansión del siglo XVIII que se construyó en el emplazamiento de las cocinas del antiguo castillo. Eso significa que cuenta con elementos medievales, aunque por dentro es totalmente de estilo contemporáneo.
El hotel es muy tranquilo y acogedor. Nada está de más en sus 21 habitaciones, la mayoría de las cuales pueden disfrutar de patio interior y jardín. Pese a que no dispone de restaurante, no será fácil encontrar uno por las estrechas calles del barrio del castillo. Evidentemente, al no ser un hotel antiguo no dispone de esas facilidades, así como tampoco spa o gimnasio. Sin embargo, ofrece un servicio inigualable y un descanso reparador.
Si vas en coche tengo que decirte que tendrás que aparcarlo fuera de las murallas del centro histórico. En el hotel recomiendan dejarlo en uno de los aparcamientos públicos que hay por la zona, como por ejemplo Praça do Município ou Praça da Figueira. Después sólo hay que coger un taxi para llegar hasta la misma puerta. La habitación más barata la encontrarás por unos 140 euros, aunque dependiendo de la época del año puede que tengas que pagar una cantidad cercana a los 200 euros.