En estos días en los que la rutina nos envuelve, muchos somos los que ya estamos planeando nuestras próximas vacaciones. Uno de los destinos que seguramente habrá pasado por tu cabeza alguna vez es la Polinesia Francesa, un grupo de paradisiacas islas donde se puede disfrutar de la paz y la tranquilidad que supone estar rodeado de la naturaleza.
Uno de los lugares de la Polinesia Francesa que realmente merece la pena visitar es el archipiélago Tuamotu, formado por 77 atolones de coral. Sin duda, un verdadero paraíso para los amantes del buceo que todavía no está tan explotado turísticamente como las principales islas del archipiélago de la Sociedad (Thaití, Bora Bora, Moorea…). Allí se encuentra el atolón Rangiroa, el más grande de Polinesia y el segundo del mundo y, precisamente en este bonito lugar se encuentra el hotel del que vamos a hablarte hoy, el Kia Ora Resort & Spa. ¿Te apetece conocerlo?
La propiedad del resort se extiende sobre el propio arrecife de coral a lo largo de una playa de arena blanca frente a la inmesa laguna que forma el atolón. El hotel acoge distintos tipos de acomodación: Beach Bungalows, Beach Suites, Junior Suites, Executive Suites, Pool Villas y Overwater Bungalows, estos últimos construidos con pilotes sobre la misma laguna. Por supuesto, cuenta con restaurante, bar y zona de spa.
Las villas del Kia Ora son muy espaciosas y están perfectamente decoradas, creando una atmósfera de lo más acogedora, gracias a la combinación de modernidad y artesanía local.
A unos pocos metros del hotel se encuentra la línea de rompimiento de las olas del océano, donde podrás apreciar la variedad de la vida marina existente, con un hermoso surtido de peces y tiburones. Además, los más aventureros podrán practicar cualquier tipo de deporte acuático.
