Por si no era ya lo suficientemente poderoso, Donald Trump se convirtió en el presidente de los Estados Unidos generando una gran polémica, ya que no es de esas personas que le caen bien a todo el mundo. Es más bien de los que no dejan indiferente a nadie: o te encanta o lo odias.
En la NBA parece que lo odian, o por lo menos eso es lo que se desprende de las declaraciones de las principales estrellas de la mejor liga de baloncesto del mundo. Ninguno de ellos quiere pisar sus hoteles, que por cierto no son pocos.
Un boicot que no debe preocuparle mucho
Una encuesta publicada por The Washington Post ha revelado que los jugadores han dejado de ir a sus hoteles desde que en 2015 presentó su candidatura a la presidencia del país. De hecho, en 29 de las 30 franquicias de la NBA no están por la labor de dejar dinero en uno de los muchos negocios en los que está involucrado.
Solo los New Orleans Pelicans se han negado a hablar sobre el tema. Muy distinto es lo que ha sucedido con los Cleveland Cavaliers, los Chicago Bulls o los Phoenix Suns, ya que pasan de series de hoteles como los Trump International Tower & Hotel que hay en varias ciudades del país. Tampoco quieren alojarse en otros hoteles de lujo como el Trump Hotel Las Vegas o el Trump Ocean Club International Hotel & Tower.