Es imposible no relajarse con la simple imagen que vemos sobre estas líneas, y es que si hay algo que hace especial a la oferta turística de Finlandia es la posibilidad de disfrutar de unas vacaciones de desconexión total rodeado por la más bella naturaleza.
Uno de ellos es el Punkhajaru Resort, en la región con el mismo nombre conocida por ser la ciudad de los mil lagos. Como el mismo hotel pone como objetivo, el Punkhajaru Resort pretende alejarse de la civilización para volver a la naturaleza más pura, buscando un lugar tranquilo en el que dejar atrás el estrés de nuestras vidas y dedicarnos únicamente a desconectar y a encontrarnos con nosotros mismos.
Las cabañitas de madera son encantadoras tanto por fuera como por dentro, donde una acogedora decoración rústica te hace sentir completamente reconfortado, protegido y tan a gusto como en tu propia casa.
Cada uno de los 39 bungalows que componen el resort disponen de sauna y hoguera, unos lujos a los que pocos estamos acostumbrados en las cabañitas de madera en las que podemos habernos alojado anteriormente (lo que se entiende por las bajas temperaturas de la zona).
El Punkhajaru Resort es el alojamiento ideal para ir en familia, no sólo porque dispone de varios apartamentos a partir de cuatro personas sino también porque la zona que lo rodea es magnífica para realizar actividades al aire libre con los más pequeños, dejando a un lado los entretenimientos más superficiales a los que ya estamos acostumbrados de otros destinos vacacionales.
Entre las actividades a realizar están las diferentes excursiones por la zona, la pesca, los paseos en barca o los baños en las frescas aguas del lago Puruvesi. Y cuando oscurece, nada mejor que una tarde de ocio en la sala de juegos (con ping-pong y billar, entre otras cosas) y una buena cena en el Kota grill House Restaurant.