¿Sabéis cuál es el nombre de este inclasificable hotel que veis en la foto? Si habéis pensado directamente “la bota”, habéis acertado. Desde luego, sus dueños no se complicaron demasiado a la hora de bautizar al The Boot Hotel, porque probablemente su imaginación estaría agotada después de tamaño despliegue de originalidad…
En este establecimiento se puede dormir literalmente en una bota, como la viejecita que vivía en un zapato de la popular poesía inglesa tradicional. Es posible que no sea el lugar más elegante del mundo, pero quienes conserven alma de niño seguro que disfrutarán alojándose en él.
En un paraje privilegiado
El hotel The Boot se encuentra, eso sí, un poquito lejos. Concretamente se haya en Nueva Zelanda, en un enclave privilegiado: en el corazón de la Costa Rubí, un punto idóneo para explorar la región de Abel Tasmen y Nelson. Más que un hotel se trata de una construcción completamente equipada, diseñada especialmente para parejas que deseen disfrutar de una escapada romántica, íntima y literalmente “de cuento de hadas”.
Patio exterior y desayunos de lujo
Si exteriormente el hotel es algo extraño, la verdad, en su interior no hay nada que destaque por su rareza. Al contrario: “la bota” cuenta con un patio privado y un fresco jardín, ubicado en un bosquecillo de avellanos y con una chimenea de exterior. Dentro también hay chimenea con sofá, y una planta superior donde gozar de la intimidad del dormitorio. Los desayunos, según indican sus propietarios, son un auténtico lujo… ¡Qué envidia! La verdad, dan ganas de convertirse en calcetín y poner rumbo a Nueva Zelanda hoy mismo. Para soñar un poco y por si os animáis, en la página web de The Boot Hotel podréis encontrar más información.